Esa mirada que confía.
Esa mirada que pregunta.
Esa mirada que me insita a bajar la cabeza o a subir el pecho.
Esa mirada que no está ausente aunque no estén tus ojos presentes.
Esa mirada que sonríe.
Esa mirada que castiga mis descuidos.
Esa mirada que alaba mis aciertos.
Esa mirada que enseña.
Esa mirada que gatilla mis motivos, mis razones y mis instintos.
Esa mirada que calienta mis fríos y apaga mis bríos.
Esa mirada que me controla con sabiduría.
No siempre me ves pero siempre me miras, me sigues pero no me persigues.
Esa mirada me cohíbe, me excita y me estremece.
Esa mirada me pone de frente a la existencia en su máxima expresión: corporeidad, relación intermediara entre espectros y colores; sabores y resistencias.
Esa mirada me lleva hasta ti y me trae de vuelta sin separarme de ti.
Esa mirada congela el pasar del aire, del tiempo, del dolor, del pensamiento.
ESA MIRADA, TU MIRADA, ES LA REPRESENTACIÓN DE LA ETERNIDAD EN UN INSTANTE
Dr. Phyloel
Brújula para viajeros del alma
-
Hola, amigos. Muchos ya estamos de regreso de las vacaciones y con ganas de
retomar la vida bloguera. Por ello me parece el momento perfecto para abrir...
Hace 11 horas