29 jun 2008

NUESTRO TIEMPO SAGRADO


Un mágico y misterioso proceso que en las diferentes etapas y culturas tuvo las más variadas explicaciones.
Desde ver a la mujer como un ser diabólico y peligroso, que durante esos días debía ser evitado por impuro, que no podía tocar los alimentos porque se deterioraba su valor nutritivo, o no podía tocar las plantas en flor porque éstas se marchitaban, hasta creer que algunas mujeres se convertían en peligrosas hechiceras que si te “echaban un mal” sólo ellas podían curarlo, y así podríamos contar un largo etcétera.
Tanto se nos convenció de que era algo feo que había que ocultar, que empezamos a avergonzarnos de nuestra condición de mujeres y empezó el dolor y la resistencia.
Nuestra disponibilidad a un proceso mágico de nuestra vida se vio anulado y entregamos nuestro cuerpo al absurdo proceder de un ginecólogo, que nos convence diciendo que el dolor es normal y nos entrega unas cuantas píldoras.
Ahora ya no es necesario seguir nuestros ciclos naturales, con unas píldoras todo queda arreglado.
Cualquier científico autorizado y respaldado por un diploma sabe más que nosotras mismas.
Tú, que lloras por la injusticia, el deterioro indiscriminado de la ecología, no vas a llorar por tu microecología, ella también está en peligro.
El dolor en tu proceso menstrual, no es más que la negación de tu condición de mujer, la ignorancia de no estar reconociendo tu lugar en esta vida.
Tú centro de poder es tu matríz, es lo que te une con la Tierra , con el pulso del Universo.
Son días mágicos los días previos a la menstruación, cuando nuestro cuerpo se prepara para ello. Ponte receptiva y date la oportunidad de pedir el afecto y la comprensión que necesitas.
Son momentos en los que se acrecienta nuestra ternura, en los que nos convertimos en hijas y mamás, hermanas y compañeras, en los que pasamos por instantes de adultas y de niñas, pero en un mundo como el nuestro, acariciar, amar, ser tierno y sensible, no es rentable; eso hace los corazones fuertes y crea seres humanos felices, y los seres felices viven en paz, y no son manipulables ni consumistas, por eso, el amor la poesía y la ternura, fueron extirpados de una forma natural de vida, cuando lo contrario es: SIN AMOR NO ES POSIBLE LA VIDA.
Desde hoy, preparémonos de nuevo. No es necesario que mires el calendario, siente tu cuerpo, observa tus sentimientos. Si te da tristeza, no te aísles, cuéntalo a tu mamá, a tu amiga o tu compañero.
Todo en ti se renueva, se limpia , se purifica, empieza de nuevo. Encuéntrate como mujer divina y verás cómo ese ser sagrado despierta en el interior de tu templo.